Los gases inflamables son indispensables debido a que son utilizados tanto en distintos tipos de industrias como en los hogares. Estos elementos tienen propiedades específicas que los hacen útiles, pero también requieren un manejo adecuado para evitar riesgos. Explora sus tipos, su clasificación y cómo manejarlos correctamente.
¿Cuáles son los gases inflamables?
Los gases inflamables son aquellos que, al entrar en contacto con una fuente de ignición, pueden arder, lo que los convierte en un riesgo potencial para la seguridad. Esta propiedad los hace especialmente peligrosos cuando no se manejan correctamente.
Entre los gases inflamables más comunes se encuentran el metano, el propano y el butano, los cuales se utilizan tanto en aplicaciones industriales como domésticas. Su peligrosidad radica en que se encuentran en estado gaseoso, lo que facilita su dispersión en el aire y aumenta las posibilidades de ignición.
Ejemplos de gases inflamables
Metano (CH₄)
Este gas es el principal componente del gas natural, utilizado en calefacción, cocina y como combustible en vehículos. A pesar de ser menos denso que el aire, se dispersa fácilmente y puede ser explosivo en concentraciones altas.
Propano (C₃H₈)
Se utiliza en algunos cilindros de gas para cocina y calefacción, especialmente en áreas sin acceso a gas natural. Es más pesado que el aire y tiende a acumularse en espacios bajos si hay fugas.
Butano (C₄H₁₀)
Similar al propano, se utiliza en encendedores, estufas portátiles y otros dispositivos. Es común en las bombonas de gas para camping.
Hidrógeno (H2)
Aunque no se utiliza tanto en hogares, el hidrógeno es un gas inflamable con aplicaciones en la industria y como combustible en vehículos. Su alta inflamabilidad lo convierte en un gas peligroso si no se maneja con precaución.
Clasificación de los gases inflamables
Según la UNEP (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente), los gases inflamables se clasifican en función de su capacidad para formar mezclas explosivas con el aire, basándose en dos criterios principales: el Límite Inferior de Inflamabilidad (LIE) y el Límite Superior de Inflamabilidad (LSE).
Estos límites son importantes para determinar la cantidad de gas en el aire necesaria para que ocurra una ignición. El LIE es el punto en el que la mezcla se enciende, mientras que el LSE es la concentración máxima de gas en el aire, donde la mezcla ya no es inflamable. Entre los gases inflamables más comunes se encuentran:
- Gases con bajo límite de inflamabilidad: tales como el hidrógeno y el metano, que requieren una concentración baja en el aire para que se produzca una explosión.
- Gases con alto límite de inflamabilidad: como el propano y el butano, que requieren una concentración más alta de gas en el aire para que se produzca una ignición.
¿Cómo manejar los gases inflamables con seguridad?
El manejo seguro de los gases inflamables es indispensable para prevenir accidentes y proteger tanto a las personas como a las instalaciones. Aquí algunas recomendaciones para garantizar su seguridad:
Instalación adecuada
Asegúrate de que las instalaciones de gas estén correctamente diseñadas y sean seguras, con válvulas de cierre y sistemas de ventilación eficientes.
Evitar fugas
Es crucial detectar y reparar cualquier fuga en las instalaciones de gas para prevenir la acumulación de gases inflamables en espacios cerrados.
Uso de detectores
Colocar detectores de gas en áreas de riesgo, como cocinas o áreas industriales, puede ayudar a identificar posibles fugas antes de que se conviertan en un problema grave.
Además de estas recomendaciones, de acuerdo con la Guía Práctica sobre Riesgos Químicos de la CENAPRED, “la concentración de gases o vapores inflamables no debe ser superior en ningún momento al 20% del valor del límite inferior de inflamabilidad” en espacios de trabajo confinados.
Educación constante
La formación y la conciencia sobre los riesgos de los gases inflamables son esenciales. Todo el personal y los usuarios deben estar capacitados para actuar en caso de emergencia.
Compromiso con la seguridad en el uso de gas natural
La seguridad en el uso de gas natural, tanto residencial como para negocios, es fundamental. En Naturgy, nos aseguramos de que todos nuestros usuarios cuenten con los recursos necesarios para utilizar el recurso sin preocupaciones. Contamos con 10 niveles de seguridad que permiten prevenir riesgos y garantizar el buen funcionamiento de las instalaciones.
A través de medidas preventivas y una adecuada gestión de riesgos, trabajamos para ofrecerte una experiencia segura y confiable en el uso de gas natural. Asimismo, promovemos constantemente la educación sobre el manejo seguro de estos recursos, y compartimos información valiosa para que nuestros usuarios puedan identificar riesgos y actuar de manera adecuada.
Si te interesa contratar gas natural en tu hogar o negocio para disfrutar de sus múltiples beneficios en seguridad, ahorro y constancia, te invitamos a llenar el siguiente formulario.
Fuentes de consulta:
- http://www.digeca.go.cr/sites/default/files/documentos/cuestiones_tecnicas_inflamabilidad.pdf
- http://www.proteccioncivil.gob.mx/work/models/ProteccionCivil/Resource/373/1/images/guiap_rq.pdf
- https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/601757/TEMA_1_RIESGOS_QUIMICOS.pdf
- https://unece.org/DAM/trans/danger/publi/ghs/GHS_presentations/Spanish/phys_haz_s.pdf
- https://www.esders.es/2023/08/gases-inflamables-ex-tipos-y-seguridad-en-atmosferas-explosivas/




